Conoce lo que es el síndrome de Mallory Weiss, así como el tipo de problema que se puede presentar y las complicaciones que puede causar a la salud.
El síndrome de Mallory Weiss se presenta como una ulceración o úlcera lineal en la unión de la mucosa esofágica y gástrica. Esta laceración puede ser múltiple y afectar a la capa muscular. El síndrome a menudo aparece después de importantes esfuerzos para vomitar. Generalmente insignificante, el sangrado desaparece espontáneamente.
Como consecuencia de un aumento del empuje intraabdominal (hipo, tos, estreñimiento y especialmente esfuerzos por vomitar), el síndrome de Mallory Weiss se manifiesta por uno o más vómitos con sangre (hematemesis). Puede asociarse a una melena (heces negras) en casos excepcionales con sangrado importante. En el 10% de los casos, el desgarro no es solo de la mucosa sino de toda la pared esofágica (síndrome de Boerhaave), puede aparecer inestabilidad hemodinámica o shock.
Diagnóstico del síndrome de Mallory Weiss
El examen clínico no es una opción para diagnosticar este padecimiento. La endoscopia permite diagnosticar y evaluar su gravedad.
Al interrogarlo, el paciente menciona ausencia de dolor, pirosis y disfagia. Sin embargo, provocará hematemesis (exteriorización de sangre roja a través del vómito). La cantidad de sangre no es un criterio esencial para evaluar la gravedad del síndrome. El médico examinará el estado hemodinámico del paciente (taquicardia, sudoración, extremidades frías, malestar persistente, presión arterial baja). En caso de sangrado importante, con el tacto rectal, el médico nota una melena (heces negras).
Tratamiento del síndrome de mallory weiss
En la gran mayoría de los casos, el síndrome se resuelve de forma espontánea. La elección del tratamiento depende de la gravedad de los síntomas.
En presencia de formas simples del síndrome, el médico generalmente solo prescribe antiácidos como los IBP (inhibidores de la bomba de protones tipo “omeprazol”).
Si la endoscopia muestra sangrado activo, la hemostasia debe iniciarse mediante inyección de adrenalina o termocoagulación. La inyección de productos esclerosantes (adrenalina) también conducirá a la hemostasia.
En los casos en que la pérdida de sangre produzca anemia grave, el médico debe prescribir una transfusión de concentrados de glóbulos rojos.
¿Dónde tratar el síndrome de Mallory Weiss?
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